martes, 19 de abril de 2011

Richard Cory

Hacía tiempo que no escuchaba el disco Wings Over America, del grupo musical Wings, el único album en directo de la banda que Paul McCartney formó tras la disolución de The Beatles.

Una de las canciones que aparece en ese triple album de vinilo tiene el mismo nombre que da el título a esta entrada. Es una canción que transmite sentimiento. Originalmente compuesta por Paul Simon en 1965, prefiero la versión más moderna. ¿Quién era ese tal Richard Cory?

Buscando un poco por la red descubrí que proviene de un poema corto, y poco conocido, de Edwing Arlington Robinson. De hecho, la letra de la canción que nos ocupa es una ampliación libre de dicho poema.

Los pocos versos que contiene nos vienen a hablar de la futilidad de la existencia humana, de la vanidad del dinero y del escaso poder de las riquezas para dar felicidad. Me he permitido la licencia de traducir el poema, puesto que no hay muchas traducciones a nuestra lengua.

"Cada vez que Richard Cory bajaba a la ciudad,
Nosotros, la gente de a pie, nos quedábamos mirándole:
Era todo un caballero desde los pies a la cabeza.
Pulcro y favorecido, regiamente esbelto.

Siempre era presentado en silencio
Y siempre mostraba su humanidad cada vez que hablaba.
Aun así se agitaban los pulsos cuando decía:
“Buenos días”, mientras él relucía al caminar.

Y era rico –sí, más rico que un rey-
Admirablemente instruido en cada cortesía.
En fin, pensábamos que era todo
Para hacernos soñar que estábamos viviendo en su lugar.

Continuamos trabajando, esperando la luz,
Sobrevivíamos sin comer carne, y maldecíamos el pan,
Pero Richard Cory, una apacible noche de verano,
fue a casa y se metió una bala en la cabeza."